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Hay algo que necesitas saber desde el principio... Conozco cientos de casos y trabajo con decenas de personas que tienen la energía, la inteligencia y el empuje necesario para iniciar un negocio en internet.

Tienen las ganas pero simplemente no pueden arrancar por una de las siguientes razones:

Carlos Andres Gallego
Carlos Andrés Gallego
Consultor de Negocios en Internet
       a) No saben cómo crear un sitio web ni los detalles técnicos del caso.
       b) No tienen dinero para pagar a alguien que lo haga por ellos.

O ambas...

Si a ti te pasa algo similar. Sé como te sientes. Incluso yo lo viví.

Sobre todo cuando lees y escuchas a toda esa gente hablando de miles de dólares al mes trabajando desde casa. Madres que pueden quedarse criando a sus hijos y ganando dinero.

Padres que no tienen que perderse los partidos de fin de semana, presentaciones en la escuela, vacaciones y aún así no les falta dinero.

Cuando yo inicié, yo sabía que esas personas no eran más listas que yo, ni tampoco tenían más ganas de triunfar que yo. Bueno, no voy a dármelas de “genio”, quizá algunos sí eran más listos, pero yo en mi corazón sabía que yo también tenía lo que se necesitaba.

Y cuando estás tan cerca de tener la vida que verdaderamente deseas, cuando sabes que tienes lo que se necesita, pero simplemente no puedes arrancar... eso es frustrante. Y doloroso a veces.

He tenido clientes con ideas buenísimas que jamás se vieron realizadas porque no sabían cómo empezar en el internet. Otros que incluso sabían de marketing, están suscritos a boletines electrónicos de marketing en internet e incluso saben más de mercadeo que algunos de los que están haciendo dinero, pero el no poder crear su sitio web hizo que sus conocimientos no les sirvieran para nada.


Es como tener mucho qué decir, pero no poder hablar. Es como tener la mina de oro, el camión para llevártelo, la cuenta del banco abierta y los papeles en regla, pero no tener el bendito pico para abrir el agujero en la mina.

¿No te has sentido así alguna vez?

Me lo imaginé. Yo me sentí así por mucho tiempo.

Pero al final lo hice. ¿O no?

Es por eso que estás tú hoy leyendo esta carta.

Al final lo logré. No fue fácil, pero ahora yo soy de “esos” que ganamos dinero por internet y disfrutamos de la vida.